Diferencia entre granito y cuarcita: ¿Cuál es la mejor opción para tu proyecto?
La piedra natural ha sido apreciada a lo largo de la historia por su belleza, utilidad y versatilidad en la construcción y el diseño de interiores. Entre los distintos tipos de piedra, el granito y la cuarcita, son predilectas en Fiorantina para encimeras o zonas con mucho desgaste debido a sus propiedades únicas.
El granito y la cuarcita son materiales naturales con considerables ventajas para que sean las elegidas en tu proyecto, pero entre ellas hay diferencias que debes conocer antes de decidirte.
Granito: La roca más dura utilizada en construcción
El granito es una rocaígnea, lo que significa que se formó a partir del enfriamiento y la solidificación del magma subterráneo. Su composición principal incluye minerales como feldespato, cuarzo y mica. La formación del granito implica la aplicación de una inmensa presión y calor en las profundidades de la Tierra, lo que da como resultado uno de los materiales más duros y resistentes.
Muchas son las partes del mundo donde se encuentra el granito. Cada ubicación aporta a la roca unas características diferentes, es por ello que podemos encontrar diversos colores en los distintos tipos de granito permitiendo una variedad impresionante de opciones para aplicaciones en diseño de interiores y exteriores.
Cuarcita: La transformación de la arenisca
La cuarcita, por otro lado, es una roca metamórfica que se origina a partir de la arenisca, un tipo de roca sedimentaria compuesta principalmente de granos de cuarzo. Durante el proceso de metamorfismo, la arenisca se somete a altas temperaturas y presiones, lo que causa la reorganización de sus minerales y la formación de cuarcita. Como resultado, la cuarcita tiene una composición dominada por cuarzo, pero acompañada de otros minerales, lo que le otorga una apariencia más uniforme en comparación con el granito y una paleta más amplia de colores.
Diferencias clave entre granito y cuarcita
Ahora, profundicemos en las diferencias clave entre granito y cuarcita, lo que te ayudará a tomar una decisión informada al elegir el material perfecto para tu proyecto de construcción, reforma o diseño de interiores.
Composición mineral
Granito: El granito se compone principalmente de feldespato, mica y cuarzo, lo que le da una apariencia moteada muy reconocible en este tipo de piedra natural.
Cuarcita: La cuarcita está dominada por el cuarzo, lo que le confiere una apariencia más uniforme en comparación con el granito.
Proceso de formación
Granito: Se forma a partir del enfriamiento y solidificación del magma subterráneo, bajo altas temperaturas y presiones.
Cuarcita: Surge de la metamorfosis de la arenisca, sometida a altas temperaturas y presiones a lo largo del tiempo.
Dureza y durabilidad
Granito: Destaca por su extrema dureza y resistencia al desgaste, al calor y a los arañazos.
Cuarcita: La cuarcita es una roca muy resistente y duradera igual de recomendable que el granito en aplicaciones de cocina y zonas de mucho desgaste.
La dureza de las piedras naturales se mide a través de una escala del 1 al 10 llamada “Mohs”, en la que el granito y la cuarcita obtiene un 7 comparando su dureza ala del acero. Es por ello que, ambos materiales son excelentes en cuanto a resistencia al calor, los arañazos y paso del tiempo.
Apariencia y color
Granito: Ofrece una amplia variedad de colores, desde tonos claros hasta oscuros aunque en su mayoría siempre con patrones moteados. Los tonos tierra son los predominantes en los granitos siendo el gris, el marrón y el negro lo más abundantes.
Cuarcita: Su superficie tiende a ser más uniforme, con una variedad de colores más amplia que la del granito. Entre nuestra colección de cuarcitas puedes encontrar cuarcitas turquesas como la “Alexandrita”, cuarcitas verdes como “Botanic” o cuarcitas que combinan varios colores en su superficie como con Gaultier, Fusion o Louise Blue. Además, la cuarcita se asemeja más al mármol en términos estéticos por el dibujo de sus vetas en la superficie.
Tanto el granito como la cuarcita son rocas naturales excepcionales que aportan belleza y durabilidad a proyectos de diseño de interiores y arquitectura. Si bien ambas son opciones populares para encimeras de cocina, también empiezan a abrirse camino en revestimientos de suelos y paredes.
Los dos materiales tienen muy buenos resultados con diferentes acabados como el efecto piel, cepillado, envejecido, pulido entre otros.
